Estudio indica que retrasos en habilidad motriz impacta en el desarrollo cognitivo de los niños


La investigación realizada por expertos del Instituo de Educación de la Universidad de Londres analizó a casi 15 mil niños nacidos entre 2000 y 2001. Analizaron el nacimiento de los bebés y sus avances desde los 9 meses hasta que cumplieron cinco años. Luego de un lustro, el desarrollo cognitivo de los menores fue evaluado a través de una serie de tests de vocabulario, razonamiento espacial y pruebas de imagen.

Los resultados presentados a los cinco años estaban fuertemente vinculados a las capacidades de los bebés en las pruebas de desarrollo motor grueso (como gatear) y el desarrollo de la motricidad fina (como sostener objetos con sus dedos).

Además los niños que no presentaron avances significativos durante los primeros nueve meses en el campo del desarrollo motor grueso ( como sentarse sin ayuda, pararse y dar sus primeros pasos) se encontraron 5 puntos menos en las pruebas de capacidad cognitiva adoptadas a los cinco años.

Ingrid Schoon, profesora de desarrollo humano y política social de la U. de Londres, explicó que "el retraso en el desarrollo motor grueso y fino en el primer año de un niño - que afecta a uno de cada 10 menores - se asoció significativamente con el desarrollo cognitivo retrasado en los cinco años. Esto también tiene impactos en el comportamiento que el menor tenga a esa edad".

La experta señaló que los descubrimientos de esta experiencia ponen en relieve la importancia de la detección temprana de retrasos en el crecimiento de un niño, como "una herramienta para promover su desarrollo positivo".