La Presidenta anunció con alegría el otorgamiento de 30 mil becas para chicos pobres.


"La idea de las becas es orientar desde el Estado a ciertas carreras duras que necesitamos para hacer sustentable el desarrollo y el crecimiento", dijo. "La educación ha cambiado, antes había una edad para estudiar y otra para trabajar, pero hoy ya no hay ciclos, la capacitación es permanente, por los grandes avances que hay en la tecnología y en la ciencia, en un mundo que cambia constantemente", agregó en un acto que encabezó en el Salón Blanco de Casa de Gobierno con motivo del día del maestro.

En tanto, destacó que "el rol que el Estado nunca debe abandonar es ser promotor y sustentador de la educación pública y gratuita, lo que nos permite ser reconocidos en materia de recursos humanos en toda la región y en el mundo".

"Los sectores de bajos ingresos son los que más ayuda necesitan para que los chicos no sólo ingresen a la carrera, sino que puedan seguir", opinó y sostuvo que "hoy la formación y la educación es de carácter permanente".

El Ministerio de Educación informó que los alumnos que accedan a las becas contarán con una subvención económica anual que se pagará en 10 cuotas mensuales durante cada año de carrera.
Para las carreras de grado se otorgarán 500 pesos mensuales y a las tecnicaturas 350 pesos mensuales.

La comodidad que mostró Cristina en La Rosada distó del mal momento que vivió Narodowski anteayer, cuando debió escapar por una cocina contigua a la legislatura porteña, acompañado por sus asesores, en medio de las quejas -a los gritos- de los estudiantes que exigían una explicación acerca de los criterios que utilizó para reducir la cantidad de becas en agosto pasado.

Todo había empezado en agosto. A partir del decreto 976, el macrismo sólo otorgó 23.000 de las 60.167 becas solicitadas. Argumentó que los montos serían mayores -de $250 y $450 pasarían a $600 y $800- y sólo estarían destinadas "a quienes realmente las necesiten".

El respuesta de los estudiantes no se hizo esperar: catorce colegios fueron tomados. El Gobierno porteño ratificó el decreto, suspendió clases en los colegios tomados y pidió a sus directores que identificaran a los protagonistas de las protestas.

EL PADRE DEL AULA. La Presidenta destacó la importancia que tuvo en la historia de la educación argentina Domingo Faustino Sarmiento, dado que pudo anticipar el "rol de la educación en el progreso de la sociedad".

"Sarmiento podrá ser discutido por sus ideas, pero no por el lugar que ocupa en la historia, porque fue un visionario que pudo ver en el siglo XIX el rol que tenía la educación en el crecimiento y progreso de la sociedad", dijo la Presidenta en un acto que encabezó en el Salón Blanco de Casa de Gobierno con motivo del Día del Maestro.

La mandataria también hizo un reconocimiento especial a la educadora Berta Braslavsky, quien falleció el martes pasado, por ser "una mujer comprometida políticamente y con la educación argentina".