2-Andamio Número dos: Prácticas Educativas con sentido

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Categoría: Libro: Andamios

La reforma educacional chilena, puso en discusión las prácticas educativas al interior de los colegios, escuelas y liceos de nuestro país. No es fácil "reformar" un estilo que se ha mantenido por cientos de años y un porcentaje importante de personas lo reconocen como exitoso, es más, se agregan frases como "antes en los colegios sí se enseñaba, los niños salían derechitos", "la letra con sangre entra" y otras frases parecidas que hacían y hacen relación con la educación de antes versus la educación de ahora. Según la Real Academia Española, reformar significa cambiar algo para innovarlo y mejorarlo, arreglar, corregir, enmendar.

Lo cierto es que para nadie ha sido fácil, la cultura de los pueblos no nace de la noche a la mañana, se va construyendo de a poco, día a día, con prácticas que las personas van internalizando y reconociendo como propias y son las que finalmente se conciben como únicas y no se reconocen otras porque no se piensan otras, esa es la forma y así es como se actúa y se vive. Así funcionan las estructuras del pensamiento humano y es necesario, a veces, provocar terremotos para mover el piso de estas y darle al pensamiento y al lenguaje estructural del vivir un nuevo sentido. Hay que reconocer que en ocasiones ni siquiera los sunamis logran modificar paradigmas culturales. Sin embargo creo que en relación al mundo de la educación (y por supuesto a otros), bien vale la pena darle una mirada al que hacer cotidiano y preguntarnos humildemente (de esa humildad con sabor a sabiduría) "si sigo enseñando de esta manera ¿cuál será el resultado?

Entonces aparece la segunda parte, quien nos enseña a hacerlo diferente? y aparecen las interrogantes lógicas de este proceso inicial, ¿qué es lo que debemos modificar y porqué debemos hacerlo?. El marco teórico de la Reforma y de diversos estudiosos y opinólogos del tema, nos darán la respuesta, es más, nos darán múltiples respuestas, todas sonaran obvias y de fácil implementación, sin embargo la realidad nos está indicando que algo no se está entendiendo y creo que la base no radica únicamente en la no disposición al cambio (que también está presente), sino en la falta de convencimiento que este deba suceder y la ausencia de herramientas pedagógicas prácticas para darle curso a un nuevo estilo de hacer educación. Dice un reconocido escritor argentino que "más vale una certeza que muchas incertidumbres", los pedagogos nos hemos llenado de incertidumbres. Hacen faltas algunas certezas, de esas que tengan fuerza y sean capaces de "mover estructuras" , no por el solo hecho de moverlas porque otros así lo creen, lo norman, lo decretan y lo legislan, sino porque lo vemos necesario porque creemos que es el momento y porque nos sumamos como educadores a un proceso del cual somos parte.

El biólogo chileno Humberto Maturana, reconoce a "los seres vivos no como conglomerados de propiedades o componentes con importancia funcional, sino como entes dinámicos autónomos en continua transformación en coherencia con sus circunstancias de vida" , fuera de la complicación de las palabras y el juego de estas (estilo muy propio de H. Maturana que nos hace confundir en la interpretación de lo que "quiso decir"), debemos reconocer que tiene razón, somos dinámicos y este movimiento está en relación a nuestro entorno, a lo que estamos viviendo. No es lo mismo ejercer la profesión de docente o maestro en los años 1970, 1980, 1990,que ser profesor en el año 2008.

En la actualidad basta con dar un trabajo de investigación, para que el alumno llegue a su casa encienda el computador o uno de los computadores y ponga las palabras claves en alguno de los muchos buscadores y ya tiene material para comenzar a trabajar, también puede llamar a un amigo por celular, mandar algún fax, escanear documentos o imágenes, y comenzar a crear. Esto en el mejor de los casos, ya que lamentablemente en la mayoría de estos vamos a descubrir que hizo el mismo proceso pero solo corto y pego y luego presento el documento y si la portada estaba atractiva y había empleado corrector ortográfico (también del computador), se sacara un siete. Entonces ¿no es necesario hacer algo?. No solo estamos viendo que las antiguas prácticas y las actuales, en más colegios de los que quisiéramos, han estado llenas de metodología conductista que solo han logrado construir generaciones pasivas en relación al logro de dominios que dicen relación con opinar, descubrir, analizar, fundamentar, para que decir de hablar en público o fundamentar ideas en algún debate; sino que nos encontramos que la modernidad se nos vino de golpe, de repente y encima y debemos buscar el equilibrio.

Creo que es posible, pero esta condición se dará únicamente en aquellos establecimientos que estén dispuesto a invertir tiempo y recursos en capacitar a sus docentes en un modelo que necesita de una contención teórica, pero además de mucha práctica, guía, supervisión y apoyo. Es aquí donde podemos hablar de directores gestores, lideres, de esos de "terreno", capaces de guiar al grupo sistemáticamente, sin tregua, día a día por el sendero más apropiado. Pero debe guiarlos, es fácil, decirles "sigan, háganlo bien", y criticar desde las oficinas.

Paloma Rodriguez G.

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