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Por años, el currículo de los chilenos estuvo engalanado con un sugerente dominio de "inglés básico", pero al medirlo, rara vez alcanza ese autodefinido conocimiento.

Ahora, un nuevo estudio amenaza con acabar otro mito de la bitácora profesional nacional: el manejo computacional, en la que la mayoría afirma tener sólidas habilidades. Por ejemplo, un 93,6% garantiza manejar eficazmente procesadores de texto, como Word, pero al poner a prueba dichas habilidades, los resultados son otros: sólo la mitad (54,9%) maneja este programa.

Es uno de los resultados que arrojó una iniciativa de la Fundación Chile, que aplicó a 157 profesionales el ICDL (sigla en inglés de Licencia Internacional para Manejar Computadores), certificación global que mide la capacidad para utilizar productivamente computadores y las principales aplicaciones informáticas a un nivel básico.

Para obtener la Licencia ICDL se requiere aprobar con 75% tres programas básicos: Word (Microsoft), Excel (Microsoft) e internet (que incluye navegación y Outlook). El problema es que de los 157 voluntarios, sólo el 34,39% logró superar el test. El 65,61% reprobó.

"Es preocupante, ya que Chile aspira a ser un país desarrollado y según estudios de la Unión Europea, el 90% de los trabajos en los países desarrollados requiere un manejo de TIC", dice Juan López Carretero, director de Proyectos de la Fundación Chile, que dirigió el estudio, junto a Luis Santibáñez, del Uniacc.

Según López, una persona toma, en promedio, dos horas y 51 minutos a la semana en resolver problemas domésticos en su computador. "Esto da anualmente una cifra exorbitante. Por ejemplo, Italia pierde 15 billones de euros al año por este concepto. El costo de la ignorancia en el uso de la tecnología es enorme".

SEGUNDA BRECHA DIGITAL

El estudio de la Fundación Chile está intentando medir la denominada segunda brecha digital, que no se refiere al acceso a las tecnologías, sino a cómo y cuánto sabe ocupar estas herramientas. Según López, es lo que se denomina "calidad del uso", que contrasta con la sensación de los usuarios, que afirman tener buenos conocimientos, los que puestos a prueba, no son tales. "Creo que se debe a que no existe un estándar consensuado. Cada persona cree saber 'x' de acuerdo a su propia experiencia y de lo que le ha tocado realizar en su entorno laboral", dice.

"Ocurre, por ejemplo, con ingenieros comerciales, que uno da por sentado que manejan Excel, pero a la hora de tener que trabajar en la aplicación, no saben usarla", dice Isabel de la Carrera, jefa de selección de Global Outsourcing.

Según De la Carrera, no existe en Chile un parámetro establecido para medir estas capacidades. De hecho, según el estudio, los profesionales que aprobaron el ICDL, lo hace más por sus infohabilidades (condiciones naturales para el manejo de las TIC), que por tener una formación sistémica. "Muy pocas carreras en Chile tienen incorporadas en sus mallas estos programas, por lo que la formación es más bien autodidacta", dice Priscila Palacios, ingeniera en computación de la U. Andrés Bello.